Desafíos de la transición a una flota de vehículos de cero emisiones.

El transporte nacional es el sector que más emisiones genera en el Reino Unido, responsable del 28% del total de las emisiones de gases de efecto invernadero. La eliminación progresiva de los vehículos de gasolina y diésel es fundamental para los esfuerzos del gobierno por mejorar la calidad del aire y cumplir con sus compromisos climáticos, en particular, el objetivo de que el Reino Unido alcance las cero emisiones netas para 2050.

Como una de las mayores flotas de vehículos operadas por sus propios dueños en el Reino Unido, con un total de más de 30.000 coches y furgonetas, era fundamental que el gobierno liderara la descarbonización del transporte. En respuesta, el Compromiso de Flota Gubernamental (GFC, por sus siglas en inglés) exigió a todos los departamentos y organizaciones que utilizan fondos públicos para prestar servicios que realicen la transición a una flota de vehículos 100% de cero emisiones para finales de 2027.

La DVSA opera una flota de más de 1200 vehículos que realizan pruebas de seguridad vial y en las instalaciones. Necesitaba opciones para la transición a una flota de cero emisiones, pero carecía de los datos, el modelado de carbono y la experiencia analítica necesarios para lograrlo rápidamente. Por ello, contrató a ѻý para que le brindara su ayuda.

La agencia y ѻý trabajaron juntas durante un período de seis meses para determinar la mejor manera de realizar la transición de la flota operativa de la agencia a vehículos eléctricos y para contribuir a la toma de decisiones políticas a largo plazo sobre la descarbonización del transporte.

Iniciativas con viabilidad en el mundo real.

El desafío no se limitaba a la adquisición de vehículos. La DVSA necesitaba analizar aspectos financieros, incluyendo el coste total de propiedad, los acuerdos de arrendamiento y los posibles modelos de financiación gubernamental, así como la forma de integrar los vehículos eléctricos sin interrumpir los servicios esenciales. Una de las principales preocupaciones era la infraestructura: cómo garantizar un acceso fiable a los puntos de recarga, especialmente para el personal que trabaja sobre el terreno en zonas remotas.

Los socios exploraron diversas opciones de transición, evaluando los costos, los beneficios y la viabilidad, y analizando los últimos avances tecnológicos. Evaluaron el uso y las necesidades de transporte de la agencia, incluyendo el kilometraje de la flota, los trayectos habituales y la idoneidad de los diferentes modelos de vehículos. Entre las posibilidades consideradas se incluyeron la reducción total de la flota o el cambio a vehículos de hidrógeno en lugar de vehículos eléctricos, así como diferentes ubicaciones para los puntos de recarga de vehículos eléctricos.

Conjuntamente, la DVSA y ѻý crearon una herramienta de análisis para la transición de flotas con el fin de probar diferentes escenarios. Utilizando esta herramienta, realizaron pruebas sobre la viabilidad en la práctica de la carga en el domicilio y en las instalaciones de la DVSA.

La principal preocupación del personal de la DVSA era perder las citas para la inspección de vehículos si no podían acceder fácilmente a las estaciones de carga cuando necesitaban desplazarse a los centros de inspección. Para evitarlo, los socios supervisaron atentamente los sistemas telemáticos instalados en los vehículos de prueba y se aseguraron de establecer horarios adecuados para la recarga.

Una hoja de ruta clara para el futuro

A lo largo del proyecto, la DVSA constató que la adopción de vehículos eléctricos es viable, aunque presenta desafíos, en particular en lo que respecta a la infraestructura de carga y a garantizar un reembolso adecuado por la recarga de dichos vehículos.

La agencia constató que depender de la carga pública probablemente afectaría la productividad, y que si bien la carga en casa es una solución para muchos empleados, se necesitarán otras instalaciones adaptadas al uso de los vehículos para quienes no puedan instalar un cargador en su domicilio. La tarifa de compensación de HMRC para vehículos eléctricos es baja en comparación con el aumento del coste de la electricidad. Por lo tanto, se está considerando un aumento de la tarifa, lo que facilitaría la electrificación de las flotas en todo el sector público.

Se estima que esto contribuirá a eliminar 3.694 toneladas de emisiones de CO2 durante los próximos cinco años.

La Oficina de Vehículos de Cero Emisiones (OZEV) del gobierno del Reino Unido está compartiendo los resultados con otros departamentos. Con la infraestructura adecuada, el apoyo político necesario y una implementación gradual, la DVSA y otras organizaciones del sector público pueden avanzar con éxito hacia un futuro de transporte sostenible.

“Trabajar con ѻý ha transformado nuestra transición a los vehículos eléctricos. Comprendieron a la perfección los complejos desafíos de nuestro negocio, y su orientación y apoyo han sido fundamentales para mantener a la DVSA a la vanguardia de la descarbonización de flotas en el sector público.”

Carrie Dolan MBE,
Director of Corporate Services, DVSA